La pasada clase de escritura creativa recibimos una charla de una poeta procedente de Nicaragua, Marta Leonor González, muy reconocida en su país, no tanto por las obras que ha sacado a la luz, sino por el tema de las mismas, y con esto quiero empezar mi opinión sobre su "conferencia".
Desde el primer momento se apreciaba que la autora intentaba transmitir a toda la clase una especie de espíritu que nos ayudara a comprender lo que para ella significa la poesía y que así, de algún modo, las personas que la escuchábamos sintiéramos lo mismo que ella, nos inmiscuyéramos en su mundo de poeta, lo que terminó de demostrarse con una situación un tanto curiosa que procederé a comentar más adelante.
La parte de la charla que me pareció más interesante y que merece la pena destacar es el principio de la misma, en la que la poeta nos contó la importancia que para los poetas de su generación ha tenido la historia de su país, en especial una dictadura, de 1934 a 1979, conocida como Somocismo, y que desde luego marcó el carácter de los escritores del país, al haberla vivido tan de cerca. Desde luego, ella es una gran protagonista si hablamos de lo que puede llegar a marcar la situación de un país en el carácter de la persona, y, como consecuencia, en sus escritos, no en vano Marta Leonor es conocida como "la poeta de la ira", por el fuerte sentimiento y fuerza que transmiten sus escritos, aparte de la tematología que trata.
En cuanto al tema que más nos interesa, el de la poesía sin más, llevó a cabo varias afirmaciones sobre lo que en su opinión es un poeta. La que me llamó la atención sería aquella que, sin acordarme exactamente de las palabras exactas que utilizó, viene a decir que para ser un poeta no hay tanto que tener un gran talento como una gran capacidad de esfuerzo, sacrificio y superación. Respecto a esta afirmación me gustaría comentar que, si bien la capacidad de trabajo y esfuerzo, como todo en la vida, es realmente necesaria para evolucionar, sí que se necesita "algo" que te diferencie de los demás para hacer alguna obra que marque la diferencia por ejemplo.
Por último comentar que la poeta acompañó su exposición de diversos vídeos, siendo especialmente interesante aquel en el que se podían leer distintas frases de poetas reconocidos definiendo lo que para ellos era la poesía. Como opinión más generalizada sobre la charla,
tengo que reconocer que se me hizo en algunos momentos somnífera, fue demasiado
intermitente, con momentos interesantes, como el principio ya destacado que
quizá me interese a mí en especial por ser estudiante de historia, y momentos
más aburridos, como la segunda hora, bastante pesada a mi parecer. Como
anécdota, destacar el momento en el que, cual cantantes de gospel, nos hizo
ponernos en pie y autoanimarnos, con abrazos a los compañeros incluidos.
Sinceramente creo que esta parte sobraba.
A continuación voy a copiar un poema que,
observando la obra de la autora, me ha gustado en especial:
No está
Qué de mí
si en mi cama se extiende
enrollada en mi cuello
absorta de delirios
con sus esmeraldas me mira.
No es el ungido escorpión
en el lecho entre horas,
no está. Se retuerce
me ataca con el flagelo
de su cola.
Escamosa va
repta, serpentea
fluctúa en serpentín
y en retroceso arremete
en azotaína con artilugios y añagaza.